Excursión A La Montaña Moses Desde Sharm El Sheikh

Por supuesto, debes viajar al Sinaí con un estado de ánimo especial. Increíble paisaje, que en muchos sentidos no se parece a la tierra, bellos atardeceres, incomparable paisaje desértico. Este lugar es inolvidable. En su significado espiritual, el Sinaí es el santuario más grande del cristianismo y del pueblo judío.

En el Sinaí, como Moisés hace varios milenios, se puede “hablar con Dios”. Fue aquí donde Moisés recibió las tablas con los 10 mandamientos, que se convirtieron en la base moral de toda la humanidad. La santidad de este lugar es venerada en todas las religiones, es una verdadera cuna moral de la humanidad y la cultura humana.

Los peregrinos suben al Sinaí todas las noches y se encuentran con el amanecer por la mañana. Hay una capilla cristiana y una mezquita en la montaña para que puedas rezar, pedir protección a Santa Catalina y esconderte del clima. Se cree que en este lugar todos los pecados humanos son perdonados, es aquí donde aspiran las personas que experimentan angustia y culpa mental. Desde la antigüedad, la peregrinación religiosa al Sinaí ha sido una piedad especial.

La salida de la excursión se realiza desde Sharm el-Sheikh. El último grupo sale aproximadamente a las 20:50. Un cómodo autobús te llevará al pie de la montaña en 3 horas. Desde aquí, bajo la guía de un guía, comienza una caminata de tres horas hasta la cima de 2285 m sobre el nivel del mar.

Un largo camino lo llevará a una escalera de piedra de 700 escalones. Superada esta última parte de la subida, te encontrarás en la cima de la montaña. El ascenso tiene una duración de 3 horas (de 01:00 a 04:00). El momento no fue elegido por casualidad, descansando un poco después del ascenso, será recompensado por su arduo trabajo con la vista del amanecer, que en la cima del monte Moisés es más hermoso que en cualquier otro lugar.

Si el camino resulta estar más allá de sus fuerzas, tomará 60 e. libras para alquilar un camello que te llevará hasta lo alto de las escaleras. Después de descender de la montaña, visitará el monasterio de Santa Catalina, que ha estado funcionando continuamente durante 16 siglos.